Día de la Madre

Existen dos fechas en las que uno espera recibir un regalito. Por regla general será en su cumpleaños y en Navidades. Los que tienen un poco más de suerte, también le puede llegar a caer algo el día de su santo tocayo. Otros tienen la mala pata de haber nacido el día de Reyes o el 29 de febrero, aunque siempre se le puede dar un poco al ingenio; habrá que buscar cualquier excusa para celebrar en fechas alternativas y, de paso, reclamar lo que a uno legítimamente le pertence: su regalo.

Parece claro que por el simple hecho de ser, hay dos fechas en la que te caen regalos seguro, con las mencionadas excepciones.

Pues bien, a medida que a uno le van pesando los años, se ganan puntos para nuevas fechas con regalo; que si el aniversario de la pareja, que si San Valentín, que si el día del Padre y, por supuesto, el día de la Madre....

Sin querer entrar en la polémica sobre el día de la Madre, interesante y profundo debate por cierto, las mamás se merecen disfrutar de una fecha adicional en su calendario de regalos.

Por eso, ¡ahí van unas flores horneadas de mantequilla y fondant para todas las Madres!