Ahí va nuestro particular homenaje a los currantes de Bowser, a los figurantes malignos que le hacen la vida imposible a Mario, Luigi y a la princesa Peach. Incomprendidos héroes de la revolución tecnológica, sus píxeles se han ido transformando poco a poco desde los ochenta hasta convertirse en figuras en tres dimensiones. Ahora no solamente aparecen en la Nintendo, sino que también te los puedes comer.
La bala
La feroz bala, que siempre toca saltar. No es tan mala como parece, si te toca en el Mario Karts, tienes la partida ganada...
La bombita
Su cometido es meter un buen petardazo si te acercas. Aunque a veces ayuda...
El champi
O lo saltas o lo aplastas, ¡pero con esa cara de gruñón es el más currante de todos!